La cita fue en la iglesia parroquial, estuvimos 75 Amantes
de la Historia, a las cinco de la tarde, después de unos bautizos. Agradecemos
la colaboración de nuestro Párroco don Javier Lizcano Valdeolivas que nos
invitó a entrar en la iglesia y nos ayudó a la instalación de los medios
técnicos.
La visita comenzó con una vuelta por los exteriores de la
iglesia, observando los detalles que nos cuentan la vida del edificio:
materiales diferentes, ampliaciones, inscripciones en los dinteles de las
ventanas de la sacristía vieja. Terminamos este recorrido en el interior, con la
visita al baptisterio, el testigo del piso de mediados del XVIII y el pilar
reforzado con cinchos metálicos.
Ya acomodados en los bancos de la nave central observando los detalles arquitectónicos y decorativos de la iglesia, repasamos diversos aspectos de este templo que tiene una historia que comenzó en el siglo XV hasta los tiempos actuales. Recordamos la obra de referencia para su historia que es el libro AVENDAÑO POZO, María del Carmen (1993): Estudio Histórico – Artístico de Villafranca de los Caballeros. Ayuntamiento de Villafranca de los Caballeros. GSM Impresores. Madrid.
Aquí la explicación siguió las siguientes pautas:
1º.- Breve presentación del edificio: Planta de cruz latina
con tres naves, crucero con bóveda de aristas central y cupulitas en los lados,
presbiterio semicircular con cubierta de casetones y venera de piedra. Pilares
cilíndricos entre las naves, rechonchos y doblados en el crucero. Techos de
cielo raso en las naves y disposición de las capillas a lo largo del templo.
2º.- Ya mirando la presentación en la pantalla, comenzamos
con un repaso de lo que conocemos sobre la evolución de la iglesia en su
historia: inicio con dos naves y ampliaciones posteriores en sacristías y la
nave de la epístola, lugares anteriores de enterramiento, osario, cocina,
tribunas y bancos de la justicia.
3º.- Entramos en el apartado de lo que no está a la vista: las marcas de los canteros que se tallaron debajo de la venera, el hueco marcado en una saetera de la sacristía mayor, las ventanas convertidas en alacenas, el camarín de la sacristía nueva, su pequeño altar, los huecos cegados de las tribunas, las huellas del púlpito desaparecido, el baptisterio, la subida a la torre, la techumbre de madera sobre el cielo raso de la nave central, otra puerta cegada y la subida al chapitel de la torre.
Terminamos con tiempo para que comience sin apreturas la
misa de la tarde. Sólo hemos puesto falta a una persona muy destacada del taller
que es la autora de las fotografías que son la base de la explicación.
Aquí tienes la presentación de este día: 1ª parte y 2ª parte.
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