El sábado 12 nos reunimos 62
amantes de la Historia dispuestos a seguir las instrucciones de Mª Carmen Comendador.
Después de una breve
introducción a la legislación que ostentan las lagunas y la importancia de la
Reserva de la Biosfera, nos pasamos al centro de visitantes/Aula Naturaleza.
Comenzamos con una breve
presentación sobre el uso tradicional de las plantas lo largo de la historia.
Documentos tan importantes
como las relaciones topográficas de Felipe II o el Catastro de Ensenada, nos
dan una ligera idea de las plantas y la cultura ligada a ellas, que había en
nuestro pueblo.
“La Chopera”, “la Esparraguera”,
“el Espliego” o “el Calaminar” son topónimos de Villafranca, en el que probablemente
las plantas eran abundantes en estas zonas para otorgar dichos nombres.
Tapaculos, la planta de Santa
Lucía, el Nazareno, la lechezna o adormidera eran nombres que se usaban
popularmente por nuestra zona, dependiendo de su uso, su parecido, su forma o
incluso su color u olor.
Cómo se usaban estas plantas
era tarea más que estudiada por las personas de la época, cómo se trabajaba la
enea, el esparto o para qué se usaba el tomillo, el romero…
Y para acabar, intentamos
identificar algunas de las plantas de fácil localización en estos días, como
puede ser la chupamieles, la correhuela, el cardo corredor o el cardo
borriquero.
Por último, “enredamos” en
los nuevos recursos didácticos del aula.
La presentación de este día está aquí.
Una agradable visita en un
ambiente primaveral soportando una sequía rotunda. La próxima reunión será el
sábado 27 de mayo.
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