Pregón de Semana Santa 2022 – Julio Frutos Velasco


Comenzamos con el vídeo de introducción

Sres. Cura párroco y vicario

 Sr. Alcalde de Villafranca de los caballeros y miembros de la corporación municipal

 Sres. Miembros de las juntas de las distintas hermandades de Villafranca

 Queridos paisanos

 Queridos familiares y amigos

 

La  hermandad de Nuestro Padre Jesús Nazareno y del Santo Sepulcro, me ha concedido el privilegio de estar hoy aquí,  en este atril, para anunciar la Semana Santa a todos los villafranqueros.

 

Una tarea que afronto con mucha inquietud, porque uno no sabe si lo que va a transmitir es lo que se espera, o no sabe expresar con palabras,  todas las vivencias, sentimientos y sensaciones que despierta en mí, la Semana Santa.

 

Si,  un privilegio, una inmensa alegría y, como no, también, una gran responsabilidad poder anunciar, como creyente, unos hechos que se pierden en el tiempo, unos momentos de narración bíblica.

 

Un relato  que a través de  pasos procesionales que representan lo que se conoce como la pasión, se sucede año tras año en la Semana Santa.

 

 Quizá esta semana sea algo más que celebraciones, podemos definirlo como el encuentro del ser humano con la historia más grande jamás contada.

 

  Así que estar aquí,  ahora,  supone abrir el alma,  expresar vivencias, expresar sentimientos y  expresar  sensaciones.

 ¿Por qué?

 

Porque vamos a hablar de Dios,  porque vamos a hablar de creencias y emociones personales.

 

Echando la mirada atrás, hace ya unas décadas, en un viaje de ida y vuelta, mis primeros recuerdos en la hermandad de Jesús Nazareno comienzan, según me contaban, desde los dos años, con la túnica morada, y el cordón amarillo, de la mano de un nazareno, que llevaba toda la vida acudiendo fiel a su cita cada año, mi abuelo Jaro.

 

Siempre esperando en la calle La Vega, que llegase Valentín, el jefe de la hermandad. Este capirucho en mano se asomaba a la puerta y decía “Ale, Jaro, vámonos” y allá nos encaminábamos a la ermita del Cristo.

 

También me viene a la memoria que el recorrido procesional era más largo que ahora, el tramo del Toledillo hasta San Antón y bajada por la carretera, no sé exactamente el año que dejo de hacerse, pero sí sé por qué, el arreglo de la calle Toledo, que creo que fue la primera que se arregló del pueblo.

 

Y recuerdo como los sábados, se acompañaba a la Virgen de la Soledad, en una procesión nocturna, pero esta procesión no iba al cementerio.

 

También me viene a la memoria como aquellos años el sentimiento religioso lo invadía todo, la radio solo emitía sonido de cornetas y tambores y de saetas.

La tele nada, sencillamente porque casi no existía, los cines cerrados y no se concebía ningún tipo de elemento de diversión.

En la iglesia los altares se tapaban de morado y se retiraban todos los ornamentos.

 

Después de tantos años

¡¡ Ya son muchas procesiones!!

 

Es verdad que no en todas he vestido la túnica morada. Durante algunos años que fui monaguillo iba en cabeza con los ciriales o con la cruz procesional, de ello hay fotos, que pueden verse en la página del tío cazuela.

 

 También algunos años, por mi profesión,  falté a otras, pero el destino o las circunstancias quisieron que la última que no hice en el pueblo, un Viernes Santo, hiciera procesión con la Guardia Real , donde estaba destinado en ese momento, acompañando, al Cristo del Pardo.

 

  ¡¡ Ya muchas procesiones!!

 

  Y cada año enfundado en la túnica y cubierto con el antifaz del capirucho,  he visto crecer a niños y a niñas vestidos de nazarenos y ahora, hombres y mujeres ya,  son los que llevan su imagen y ocupan puestos de responsabilidad en nuestra hermandad.

 

Quiero darles las gracias, porque hoy son protagonistas y mañana continuaran con la tarea y quiero animar a los que están empeñados en llevar nuestras imágenes en andas.

 

Los animo porque probablemente sin bandas habría procesiones, sin nazarenos podría haber procesiones, pero sin anderos esas imágenes no saldrían a la calle de la misma manera.

 

Tampoco quiero olvidar a esos pequeños que ya tocan su tambor o su corneta y como dirían los buenos capataces en Andalucía

 

¡¡ Esta levantá va por ellos!!

 “Animo Valientes”

 

Bien, como he dicho al principio, estoy aquí para hablar de Semana Santa y de olor a incienso, contemplar  a nazarenos, recordar la pasión de Dios y el dolor de una madre

 

Una Semana, siete días que comienzan el domingo de Ramos, una procesión que recuerda la entrada de Jesús en Jerusalén a lomos de un borriquillo

  

Domingo que huele a palmas y olivo

Domingo de Ramos, no es un domingo cualquiera

Jesús entra en Jerusalén sabiendo que va a ser cautivo

Y luego y crucificado por la humanidad entera

 

Durante lunes y martes las hermandades preparan velas, candelabros, túnicas, mantos, flores y toda la indumentaria de cada uno de esos pasos que vamos a ver estos días, todo ello realizado por  personas que ocupan los puestos de responsabilidad en las cofradías y hermandades,  y que de manera silenciosa dedican tiempo, para darle más grandeza a cada una de esas imágenes que recorren las calles de nuestro pueblo.

 

Que os siga  moviendo, esa misma fe  para seguir trabajando por esta Semana Santa chelera.

 

Y al llegar el Miércoles Santo

 

Dos tradiciones importantes en nuestro pueblo:

Visitar la mesa de los discípulos, una tradición casi centenaria donde se representa la última cena y de la que guardo recuerdos porque fue una de las promesas que hizo y vio cumplida mi madre.

 

Y acudir al Santo Cristo para ver los Santos en Rilera

Allí en esa ermita tan querida

Vemos a Cristo con la frente erguida

Para tomar el cáliz

Lleno de nuestras culpas

El Cristo atado a la  columna, el Ecce Homo

Y detrás,  el Nazareno

A continuación el Calvario, para encontrarnos

A la Verónica, San Juan y la Magdalena que

Acompañan a la Virgen de la Soledad,

Con gran pena y sufrimiento

Por ver a su hijo muerto

 

 

 

Jueves Santo, con  sonido de bandas procesionamos

Bandas de  música y  cornetas y tambores

A este ramillete de imágenes que veneramos

Y que tienen nuestras devociones

 

Nos envuelve el sonido de las bandas

En las calles, pasos que asombran por su belleza

Solo unas velas en las andas

Muestran sus caras de nobleza

  

Viernes Santo, Procesión de encuentros

Camino del calvario Jesús, cae tres veces

Y en esa última caída, en la carretera,

Se arremolina la gente

Para ver a la Verónica limpiar su rostro y su frente

 Y por la noche Procesión del Santo Entierro, cambiamos la túnica morada por la negra, negro el manto de la Verónica, y negro el manto de la Virgen de la Soledad, una madre de luto, llena de dolor, cuyo rostro es reflejo de pena y desolación sola ante la muerte de su hijo.

 

Sábado Santo

 

Nuestra Virgen de la Soledad,  madre desconsolada,    nos lleva al cementerio.

Y, ¿Qué  nos queda al recordar a los que no nos acompañan?   Consuelo, aunque, … seguro que los podemos imaginar, como cuando hay actos aquí en la plaza, sentados en sillas blancas, un palco celestial, allí yo puedo ver a mis padres, mis suegros, familiares amigos, vecinos y todos  vosotros a vuestras  personas queridas  y que por desgracia y debido a esta pandemia que nos ha asolado, hay que recordar a muchas más .

 

Creemos que ellos están allí en el cielo,  que interceden por nosotros, al igual que algún día las personas que creemos estaremos con ellos y haciendo lo mismo por nuestros hijos.

 

La Virgen,   MARIA,

 Muchos sabéis que así se llamaba mi madre,

María, parece un nombre simple, pero seguro que os suenan a todos algunas de las advocaciones de la virgen:

 

María es Virgen de los Dolores

María es Virgen del Consuelo

María es Virgen de la Esperanza

María es Virgen del Rosario

María es Virgen de los Ángeles

María es Virgen de la Soledad

 

Y así podemos llegar a un gran número de  devociones de la virgen que dan nombres a mujeres.

 

Entre ellas nuestras  madres que nos han concebido, nos han llevado en su vientre y traído al mundo, a los que estos días vestimos túnicas negras o blancas,   túnicas de nazarenos, capas españolas, teja y mantilla, traje con corbata,  brazaletes y cordones,  a todos los que están en  las aceras, a los que esperan en los rincones, calles y esquinas  de nuestro pueblo y que entre todos hacemos esta Semana Santa en Villafranca de los Caballeros. 

 

Y llega el Domingo de Resurrección


Cristo resucitado camina triunfante

Y otro nuevo encuentro tenemos este día

Con júbilo seguimos su imagen radiante

Cuando camina al lado de su madre, María

 

Bien, hasta aquí casi os he contado algo que sabéis, las procesiones en nuestro pueblo.

 

Un itinerario con el que he querido relatar actos en los que se puede contemplar, no solo el patrimonio de imágenes que tenemos, también expresamente quiero destacar con estas palabras el trabajo realizado por las hermandades y las bandas de cornetas y tambores y la banda de música que las acompañan que ponen sus instrumentos al servicio de la fe, para que luzcan de la mejor manera posible.

 

 Como he dicho al principio, también quiero compartir sentimientos.

 

                               Cada viernes Santo después de los encuentros, entro en la ermita a despedirme del Nazareno, mirarlo a la cara, pedirle perdón y  salud para verlo al año siguiente, y   alguna vez me ha venido a la mente:

 

Pedimos a Dios perdón y no perdonamos.

Pedimos salud, y no ayudamos  a los enfermos.

Pedimos ayuda y no protegemos al necesitado.

Queremos que nos hagan, sin mirar atrás    y ver lo que hemos hecho mal, o no hemos hecho, sin tender la mano a nadie, imponiendo nuestro derecho.

 Unos sentimientos que nos despiertan en Semana Santa, un tiempo para reflexionar en Jesucristo:

En su Pasión, muerte y resurrección  y en la especial  devoción que profesamos los creyentes por  Cristos y Vírgenes en sus distintos misterios.

 

Para otras muchas personas que actualmente se definen como agnósticos, ateos o incluso de otras confesiones, la Semana Santa es un tiempo empleado para realizar actividades de asueto y diversión, vamos, unas pequeñas vacaciones, y quizá una Semana Santa más ligada a la cultura. Para ellos las   imágenes, penitentes, músicas y saetas conforman una escena de ópera.

 

Por ello, cada uno tendrá su Semana Santa, unos la cultura y el arte, otros las tradiciones y los que profesamos la fe católica, la religiosidad, pero siempre con respeto hacia lo que cada uno piense o haga.

 

Hoy  día, estamos consolidando entre todos, una sociedad para los fuertes, los sanos, los triunfadores y los que pueden  gozar y disfrutar de la vida.

 

Todos procuramos rodearnos de personas simpáticas y sin problemas, que no pongan en peligro nuestro bienestar.

 

Hoy convertimos la amistad y la camaradería en un simple intercambio de favores mutuos.

 

Si la Semana Santa tiene un significado puramente cristiano; para los que decimos que lo somos,  habría  que experimentar la alegría de contagiar y dar. Un tiempo que podría ser utilizado para pensar qué cosas podemos hacer para realizar cambios en nuestras vidas y a ser posible contagiar y dar a los demás y que podemos titular:

 

SEMANA DE ACOMPAÑAR A VIVIR,

UNA MANERA DE AMAR

 

Acompañar a vivir a quien se encuentra hundido en la soledad.

Acompañar a vivir sirviendo de consuelo al que está angustiado.

Acompañar a vivir y dar afecto al que se  encuentra en la indiferencia.

Acompañar a vivir y ayudar al que está marginado, vacío de alegría y  de esperanza de vida.

 

Hoy queremos un Dios instantáneo, hecho a nuestra medida y que nos haga milagros.

Preferimos un cristianismo suave, más a la carta,  y que no nos pida compartir.

Recurrimos a Dios todo el año, pero pocas veces nos da tiempo de agradecer.

 

Llenamos a Dios de lamentos y deberíamos pedir fuerzas para estar con la mano tendida hacia las personas con frases como:

 

¿Te ayudo?  ¿Qué necesitas?

 

Aquí estoy,   No te preocupes,

 

Cuenta conmigo

 

 Creo que llevando así la vida haríamos IGLESIA con mayúsculas.

 

En fin, unos sentimientos que siempre están por debajo de las expectativas que deberíamos  tener como cristianos.

 

Os he contado vivencias, sentimientos y  quería compartir además… Sensaciones.

 

Hay una evidencia que nadie puede negar, que somos una nación con tradición católica, esto se ve en las calles de nuestras ciudades y pueblos estos días, en los que cientos de cofrades y penitentes desfilan portando conjuntos escultóricos que representan escenas de la pasión y realizados por grandes maestros del arte.

 

San Juan Damasceno decía:

“La belleza y el color de las imágenes estimulan mi oración”.

 

Con las procesiones estamos transmitiendo un mensaje evangélico y al mismo tiempo que la gente las contempla, transmitimos sensaciones.

 

Esas  imágenes en nuestras calles, se convierten en refugio y consuelo para los que creen,  que  rezan.

 

Y para los que no creen, quizá solo mirar sea su forma de rezar.

 

Durante la procesión, tapado con el capirucho  se ven y se notan

¡¡ Sensaciones!!

 

 Cuando pasan por la calle tahona, por el roce, por la carretera… Jesús atado a la columna, el Ecce Homo, el Nazareno, pasa Dios.

 

Ese Dios que aguarda al que lo niega,

Que aguarda al que no quiere verlo,

Que aguarda al que va con el carro de la compra

Que aguarda a nuestros vecinos

Que aguarda a los jóvenes

 

  A lo largo de la historia actos litúrgicos y religiosos, han inspirado a grandes artistas a pintar  y a realizar grandes esculturas de escenas de la Biblia, y a componer música y nunca mejor dicho, “música celestial”.

 

A la luz de esas sensaciones que se trasmiten,  se mueven multitud de personas incluidos los que no creen o piensan que todo esto es colorido.

 

Tenemos en España más de 20 celebraciones de Semana Santa  declaradas de interés turístico internacional:

 

Toledo, Valladolid, Sevilla, Málaga, Cuenca, Murcia, entre otras…

 

 El Evangelio en todas es el mismo, pero la música la pone el pueblo y en España podemos elegir la música que cada uno quiera para un libreto que se escribió hace ya más de 2000 años

 

                             Olor a incienso y azahar en Andalucía

                             Silencio y recogimiento en Castilla y León

                             Atronadoras tamborradas en Hellín, Calanda, Mula, etc.

                             Penitencia en los empalaos de Valverde de la Vera y en los picaos de San Vicente de la Sonsierra.

 

      Con todo ello transmitimos sensaciones a todo tipo de personas que  al verlo viven la pasión de forma directa, porque seguramente a misa vamos pocos, pero a la procesión vamos  casi todos.

 

¡¡Sensaciones!!

 

Que también transmite la Semana Santa, incluso a los que consideran solo un tiempo de vacaciones y solo quieren ver arte, cuando estos días visitan ciudades y pueblos y pasan a curiosear a las iglesias y capillas o en cualquier época del año visitando museos como:

 

El museo de la Semana Santa de Zamora

El museo Salzillo en Murcia

El museo Nacional de escultura en Valladolid

Las exposiciones de Edades del Hombre realizadas en Castilla y León

 O vean los cristos yacentes de Gregorio Fernández como el Cristo de El Pardo y el del Monasterio de las clarisas en Medina de Pomar en Burgos.

El Cristo Negro de Cáceres

¿Cuantos visitan Sevilla y van a ver a la Macarena y…

En Granada con el pretexto de  visitar la Alhambra, también pasan a ver a la Virgen de las Angustias.

 

Todos o la mayoría, aunque estén viendo solo arte, saben que muchas de esas imágenes recorrerán calles en tronos portados por penitentes, costaleros o nazarenos.

 

¡¡ Sensaciones!!

 

Hoy, hay debates si estas fiestas con sentido religioso deben tener cabida en el espacio público o no.

Pues, para los cristianos deben ser unos días con sentido profundo y buscar la manera de explicarlo a los demás con  sensaciones 

 

Al igual que pasa con admirar las imágenes ¿Qué tal si nos dejamos llevar por la música?

 

Quien no ha tarareado algo tan famoso, como esa poesía de Don Antonio Machado cantada o interpretada por todo tipo de bandas.

Probablemente las más recientes que hayais escuchado han sido el domingo pasado en la ermita del Cristo y ayer en el auditorio 

  

“Dijo una voz popular

Quien me presta una escalera

Para subir al madero

Para quitarle los clavos

 A Jesús el Nazareno”

y terminado por:

  “Que es la fe de mis mayores”

 

Cuando escuchamos esta música…y vemos las procesiones de  Semana Santa en su conjunto, yo estoy convencido y creo que más  gente,  incluso los que se definen ateos o agnósticos,  sienten como un gusanillo…

 

 Una de las aficiones que tengo es escuchar marchas procesionales en YOUTUBE y repasando esas interpretaciones he leído   comentarios como:

 

“Soy ateo, pero escuchar esto y ver llevar a una Virgen o a un Cristo al compás de esta música. Te pone los pelos de punta.”

 

“Soy músico y ateo, pero tocar esto es…Vivir la música.”

 

“No me gustan las procesiones ni las imágenes, ni toda la parafernalia semana santera, pero las marchas procesionales se te meten en el corazón y en el alma y los ojos se me inundan.”

 

Cuantas sensaciones a través de notas musicales.

 

Pues vamos a pensar que esas obras escultóricas, puestas en grandes tronos o en unas simples andas y esos sonidos de instrumentos musicales, puestos en la calle por una gran variedad de personas, esta Semana, puedan hacer su magia y despertar esas Sensaciones hacia lo religioso y lo sagrado.

 

Esto es básicamente lo he querido plasmar en el corto video del principio:

 

Las vivencias de las procesiones en nuestro pueblo

Los sentimientos que despiertan ver esa representación de la pasión

Y las sensaciones que nos invaden al verlas por nuestras calles al son de la música

 

Os invito a vivir la Semana Santa procurando, que aunque solo sea por unos días, todos nuestros malos comportamientos queden sepultados por el perdón.

Que hagamos la procesión de la otra mejilla

Que tracemos lazos entre las personas

Que no solo escuchemos, que además seamos palabra y demos trigo.

 

Hermanos cofrades, vamos a poner la Semana Santa en las calles de Villafranca de los Caballeros, con ganas, que nuestro pueblo nos está esperando y luego que cada cual intervenga en ella a su manera, como cada uno quiera.

 

  Y para terminar, me vais a permitir la licencia de agradecer

 

A todos vosotros por haberme escuchado

A la hermandad de Jesús Nazareno y del Santo Sepulcro por haberme propuesto para este pregón

A mis amigos

A mis familiares

A mis padres, para los que seguro que este pregón era maravilloso

 A Uge, mi mujer y a mis hijos por el cariño que me dan y por estos años juntos.

 

 Muchas gracias y un abrazo a todos.

Julio Frutos Velasco, domingo 10 de abril de 2022


Comentarios

  1. Gracias Julio por ese pregón. Gracias por hacernos revivir un tiempo que siempre vuelve.

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